Nexisterris

El paisaje negro de la noche se
oculto tras esa sonrisa que opaca el sol
(dejando marcas en la piel).
Un suspiro que empaño el cristal,
una imagen que cruza por mi cabeza
(y va acercándome a tu cuerpo).

Es que son tantas derrotas, que duelen en el alma.
Es que son tantas marcas que queman en la piel.

Sólo espero una mirada cómplice y
un argumento de la sabia espera
(que me da tu confianza eterna).
Cuando estemos con el alma rota
y la esperanza pendiendo de un hilo,
yo me refugiare en los pliegues de tu voz.

Es que son tantas derrotas que duelen en el alma.
Es que son tantas marcas que queman en la piel.

Y si mañana por si acaso vuelve a oscurecer,
detrás de aquellos besos y aún cuente las horas,
para esperar que vengas a buscar los restos,
del alma que en vela dejas esperando,
siempre esperando por vos.
Igual yo sabre que aún sos el camino,
igual yo sabre que sos la claridad en ésta noche gris.

Mil historias vanas y un camino que bifurcan más…
Historias enredadas, sin puertas sin más donde hallar un motivo.
Y cuando estemos con el alma rota y la esperanza pendiendo de un hilo,
yo me refugiare en los pliegues de tu voz.
Es que son tantas derrotas que duelen en el alma.
Es que son tantas marcas que queman en la piel.

Y si mañana por si acaso vuelve a oscurecer...