Artista

Pablo Milanés

QUERIDO PABLO

1985

10 QUIEN ME TIENDA LA MANO AL PASAR

Recuerdo el día exacto en que te conocí;
iba pegado al cielo y apenas te sentí,
me descubriste todo de una vez
y hacia tu mano abierta me lancé.

En toda una persona, hube de cambiar;
gente respetable para acometer,
todo un horario fijo para andar,
un diario y la mesa lista: a envejecer.

Era el perfecto aburrido fragor
de una búsqueda al centro del sol
quemando mi muerte.

Después, con los hechos cotidianos fue
que nos proyectamos para hacernos tres,
en la esperanza del que iba a nacer,
mis frustraciones todas las volqué.

Mientras que los hechos hubo que forzar,
todo este triste mundo tendió a fracasar,
lo único estable es la felicidad,
que no se compra ni se da en caridad.

Era la alegría de un pájaro gris,
con su canto pidiendo morir
porque estaba preso.

Ahora, junto al cielo me voy a quedar;
quien me tienda la mano al pasar
comparte mi suerte.