Artista

Lucero

UN LUCERO EN LA MÉXICO (POP)

1999

8 MEDLEY BALADAS

Apuesto a que no te lo imaginas,
es más, tú ni lo puedes sospechar,
te amor porque es cierto que te amo,
y callo porque tengo que callar.

Si vieras la de noches que te sueño,
trepando y enredándote en mi piel,
amantes sin presente ni pasado,
ya ves, hasta soñar puede ser cruel.

Amor secreto, flor de cristal,
sin ti no vivo, contigo igual.
Amor Secreto, trágico error,
contigo nada, sin ti, peor.
Amor secreto, flor de cristal,
sin ti no vivo, contigo igual.
Amor Secreto, trágico error,
contigo nada, sin ti, peor.

----------------------------------------


Como dos caminos que se encuentran,
mi amor se encontró contigo,
como ramas verdes que se enredan,
mi amor se enredó contigo.

Como leña que arde al rojo vivo,
mi amor se encendió contigo,
como mariposa que se posa
al abrigo de tu

Fuego y ternura, amor que perdura,
calor, dulzura, amor que no duda
de sus caricias, amor sin malicia,
sueños, sonrisas, amores sin prisas.

Fuego y ternura, amor que perdura,
calor, dulzura, amor que no duda,
fuego que prende, ternura que enciende,
amor que nace, que se abre y florece.

-----------------------------------------


Tu desdén,
el frío de tu mirar,
a quien juraste morir,
amando, amando, amando, sí.

Tu desdén,
veneno puro, mortal,
es necio, cruel y total
y eso duele, amor, y eso me hace mal.

-------------------------------------------


Que me siento como un carro de fuego
junto a ti.

Corazón a la deriva,
náufrago en la mar de tu cuerpo,
donde voy al fin
si me falta el huracán de tus besos.
Te quiero, quiero.

Corazón a la deriva,
floto con las nubes del cielo,
luna de marfil, haz que nunca se termine mi sueño.
Déjame seguir, sólo un poco más.

-----------------------------------------


Tanto, como mercurio derramado,
tanto, como salvaje aroma de limón.

Sensación de caminar con pies desnudos,
sobre la nieve primera
del invierno sin tener
porqué marcarnos metas.

Tú me quieres, yo te amo sin descanso,
para qué necesitamos
bendiciones de papel
con las que atarnos.

Tanto, que tiemblo sólo de pensarlo,
tanto, que todo tiene ya sabor a ti.

Tan sencillo amansar tus ojos.