Vanesa Martín

Tú no tienes que cuidarme, tú no
ya sabré lo que hacer, cuando vuelva
no compitas, con ser lo mejor
y quién más me dejó, su espalda revuelta

En el fondo del mar, no hago pie
pero sé que en la orilla no hay trato
si me mira la Luna de abril
con su boca febril
y su cuerpo insensato

Siento que me voy, tan poco a poco
voy dejando restos de quien soy
que firmándole a la novedad
mi contrato fatal de la musa inmortal
que me arrastra a vivir
yo también, te perdí

Como el vals de Amelie de Tiersen
como el agua que al viento responde
del camino he aprendido a decir
que lo más natural
es lo que no se esconde

Y te vi corriendo y abriendo más vino
mi cabeza no siempre sabe parar
somos mimos peleando ante el espejo
contra, su otra mitad

Siento que me voy, tan poco a poco
voy dejando restos, de quien soy
que firmándole a la novedad
mi contrato fatal de la musa inmortal
que me arrastra a vivir
yo también, te perdí

Siento que me voy, tan poco a poco
voy dejando restos, de quien soy
que firmándole a la novedad
mi contrato fatal de la musa inmortal
que me arrastra a vivir
yo también, te perdí

Siento que me voy, tan poco a poco
voy dejando restos, de quien soy
que firmándole a la novedad
mi contrato fatal de la musa inmortal
que me arrastra a vivir
yo también, te perdí

Mi contrato fatal de la musa, eh
mi contrato fatal
mi contrato fatal de la musa

Mi contrato fatal de la musa, eh
mi contrato fatal
mi contrato fatal de la musa.